La adopción de la telemedicina ha sido lenta en todo el mundo, incluida la genética. La telemedicina se estaba desarrollando a principios de 1992 y unos 30 años después todavía se consideraba difícil de vender al sector de la salud. Las regulaciones del sector de la salud en varios países no eran compatibles con la adopción de la telemedicina, incluidos varios estados de EE. UU. Donde no está permitida.
La pandemia de coronavirus ha provocado un cambio muy rápido en la forma de vida de las personas. Algunos de estos cambios en respuesta a la pandemia serán a corto plazo y desaparecerán con el virus, pero es posible que veamos que algunos de estos cambios continúan más allá de la pandemia.
El uso de la telemedicina a menudo se ha promovido como una forma de proporcionar servicios médicos a quienes se encuentran en ubicaciones remotas, a áreas donde hay escasez de médicos y a pacientes que de otro modo tendrían dificultades para asistir a una consulta en persona, tal vez debido a problemas de salud. asuntos. La pandemia de coronavirus ha creado una situación en la que hay más pacientes de los que los servicios médicos pueden atender en muchos lugares. La posterior introducción del distanciamiento social y el creciente número de personas que se autoaislan ha llevado a un aumento dramático en el número de personas que no pueden asistir a las consultas en persona.
Solo el 15,8% de los genetistas utilizan la telemedicina, pero esto podría cambiar.
Anteriormente escribimos sobre cómo solo 15.8% de genetistas usan telemedicina. Para muchos que se encuentran encerrados o en autoaislamiento, la telemedicina puede ser la única forma en que ahora pueden acceder a servicios genéticos, como el asesoramiento genético. El aumento actual de la demanda de telemedicina está relacionado con aquellos que desean acceder a los médicos de cabecera. Esto está siendo apoyado por gobiernos y funcionarios del sector de la salud que quieren limitar la transmisión del coronavirus. Los gobiernos están cambiando las regulaciones y poniendo fondos a disposición de los proveedores de atención médica para que utilicen tecnologías de telemedicina. Esto también está ayudando a abordar la escasez de médicos y enfermeras en un área determinada al permitir que los pacientes tengan consultas remotas con los médicos de cabecera en un área geográfica más amplia.
La consecuencia de esta rápida adopción de la telemedicina por necesidad es que los profesionales de la salud, los reguladores y los pacientes pueden cambiar sus puntos de vista y ver los beneficios, lo que resulta en una demanda de telemedicina que sobrevive más allá de esta pandemia.